Zafando

Ayer experimenté la particular sensación del "soy pobre pero me la banco". Cobré el aguinaldo y me compré un pantalón (porque el anterior se descosió todo... ya lo había cosido varias veces y no daba más) y una cámara web. Es que no puedo comprar todo lo que quiero de golpe. Un mes me compro una cosa, y así. Y respecto a la cámara, estaba a mitad de precio y con resolución HD. Claro, marca fufito, pero la verdad es que funciona bastante bien. ¿A qué voy con todo esto? Lo que quiero decir es que todos nos quejamos de que no nos alcanza la plata y bueno, es verdad, no alcanza para nada. Pero comemos todos los días. Bueno, supongo que la gente que conozco lo hace. Por supuesto que hay hambre en el mundo y eso. Pero es diferente, me refiero a otra cosa. Como que el pobre que no es indigente se la rebusca de alguna manera, generalmente zafa y consigue lo que necesita.

Tres mil visitas

Había una vez un blog exitoso que llegaba hasta los confines de la tierra. Pero, sin buenas razones para ello, sencillamente se borró... lo borré. Qué lástima, realmente. Era una época en la que los blogs estaban todavía en auge. Buena época para ser bloguero. Pero bueno, de nada sirve llorar sobre la leche derramada. Actualmente tengo este que están leyendo con el que ya llegué a las 3 mil visitas. No es mucho, no es poco. Así que les dejo una captura de pantalla del logro alcanzado. Ladry'sfrutar.

Aceituna

La página en blanco. El origen. El Génesis de todas las cosas. La idea primigenia. ¿Por dónde comenzar? Por el principio. Había una vez un tipo que vivía en un jardín. Después se comió una aceituna y por eso existieron guerras, hambres, pestes y terremotos durante seis mil años. Me pregunto qué hubiera pasado si se comía un asado prohibido. Supongo que estaríamos presenciando La Guerra De Las Galaxias. En fin. Muchísimas preguntas y pocas respuestas. Sin embargo, ahora que lo pienso un poco mejor, una buena posición en el tablero de ajedrez no te garantiza la victoria. Me refiero a que existen tantas variantes en un juego... Y la verdad es que yo solamente juego como Bobby Fischer. Creo que más bobi que otra cosa. ¿Se dieron cuenta? Tengo la autocrítica muy a flor de piel. Asimismo, también disfruto mucho de juzgar a los demás sin estar al tanto de todos los hechos implicados.

Sertralina

Me he dado cuenta de que las entradas más positivas son las que tienen mayor cantidad de vistas. Pero claro, hombre. Lo que pasa es que uno tampoco puede sacar el optimismo de la galera. Aunado a todo este tema, también he descubierto que, durante gran parte de mi vida, he sido un niño bastante triste. Pero, ¿por qué? Bueno, es que siempre fui medio sensible, vieron. Lloraba mucho. Pero no onda así minita sino llanto por el hambre de África y ese tipo de cosas. En realidad son asuntos que a muchos ni le importan. O sea, tampoco es que yo era mejor tipo por preocuparme de esos rollos. El asunto es que desde temprana edad ya te vas dando cuenta de que hay varios temas que no están bien en este mundo. Y todo eso la verdad que deprime a cualquiera. Hoy justo estaba escuchando un podcast donde una chica relataba que se le despertó la depresión de grande. Qué sé yo, la internaron, tomaba Sertralina, se quiso suicidar. En fin, lo que le pasa a cada vez más personas alrededor del mundo. ¿A qué voy con todo esto? Bueno, a que es imposible estar pila pila todo el tiempo con todo esto dando vueltas peligrosamente alrededor nuestro.

La Gran Gilada

Me siento tan maduro que ya como que me caí del árbol y estoy echando raíces. Bueno, de todos modos todo es un ciclo. Y claro. Ponele, siguiendo con el ejemplo del crecimiento de una semilla. Primero germina, después se hace árbol, sale la flor, el fruto... pero si no lo comés, se pudre. El tema es que está bien que seas maduro, pero tampoco que te pases. Pienso que es parte de la mediocridad de la vida en la que vivimos. Cuando pensás que lo sabés todo te empezás a agriar. ¡Alegría, alegría! ¡Jajaja! Que siga esa algarabía estúpida que no te lleva a nada. En definitiva la amargura -a pesar de parecer más intelectual- tampoco te lleva a ningún puerto. ¿Entonces, qué? Entonces nada. No podemos salirnos de los límites. La vida está estúpidamente programada para que no entiendas nada más que lo que sucede en la playa. No tenemos acceso al océano. Supongo que no es lícito. Sería masomenos como algo ilegal. Como querer vivir en Júpiter. Claro, te lo podés imaginar, pero está muy lejos de ser cierto. Con los confines del conocimiento pasa lo mismo. Podés leer tres mil poemas, cuatro mil proverbios, cuatrocientas novelas. Todas van a hablar un poco más, un poco menos, de las mismas pavadas que hablamos todos los días como seres humanos. ¿Y de qué hablamos? Hace calor, frío... Siento amor, siento desamor... Vida, muerte... Blanco, negro... Bien, mal... O sea, no podemos escaparnos de la gilada. Todo es una Gran Gilada.