Al final, nos miramos todos intrigados. ¿Las cosas son tal y como las percibimos, o hay algo más detrás? Como si fuera un baile de disfraces. Pero no lo digo porque necesariamente se quiera ocultar lo que uno sea, sino porque al fin y al cabo cada uno se pone una cara para salir a escena. Es raro. Pasa que a veces estás charlando con alguien, y en secreto te estás preguntando... ¿este será extraterrestre o es simplemente otro humano? Después hablás con otro y te preguntás... ¿qué habrá sido este en otra vida? Porque una cosa no quita la otra. Uno conoce la verdad, pero también hay muchas ventanas de la percepción que se van abriendo. Otro por ejemplo habla conmigo y piensa... ¿este será el elegido? Ponele.
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